La inseguridad en Guatemala va en aumento mientras nuestra inútiles autoridades se rascan el culo y nos mienten con cada declaración que hacen a los medios. Varias notas periodísticas en La Prensa Libre y El Periódico nos han contado con lujo de detalles de asaltos y balas perdidas y yo ya lo he tocado con anterioridad en un par de blogs en Guatemala es violenta e Inseguridad y programas, pero esta vez nos tocó vivirlo en carne propia.
Esta mañana 10 minutos antes de las diez, mi compañera y yo retiramos una cantidad de dinero, destinada para la compra de una estufa, de la agencia bancaria del Banco de América Central, localizada enfrente del Parque Central de La Antigua Guatemala. Cruzamos el Parque Central y nos dirigíamos hacia nuestro vehiculo estacionado a cuadra y media del parque. Al doblar sobre la 4ª avenida sur (a la vuelta del Inguat y una cuadra del Palacio de la Policía) dos individuos con armas semiautomáticas, cargadas y listas para disparar, nos emboscaron y nos advirtieron amablemente con sus cañones en nuestros pechos y unos cuantos gritos que les cediéramos el dinero que acabábamos de retirar. Se llevaron también un teléfono móvil.
La chambita les tomo menos de 60 segundos.
El daño psicológico nos durará mucho más, ya que afortunadamente no sufrimos daño físico alguno. Hemos reportado el asalto a mano armada a la policía para que lo archive y lo engavete junto a los cientos de denuncias que reciben por mes. Al momento de hacer la denuncia había en el Palacio de la Policía una extranjera a la que le habían sustraído su bolsa con todo su dinero, tarjetas, e identificaciones. Ella y nosotros nos convertimos en una estadística más del día.
Comentando el asalto con los compañeros de trabajo, nos enteramos que ésta no es la excepción sino que la regla en nuestra hermosa ciudad colonial. Además, nos advirtieron que ése es el nuevo modus operandi de los asaltantes alrededor de las agencias bancarias del Parque Central, y que muchos de los robos a mano armada suceden a menos de una cuadra del parque.
Claro está que si este es el modus operandi de los asaltantes y la policía recibe cientos de denuncias al respecto, que se engavetan, los servicios de inteligencia policíaca no gastarían recursos en montar operativos para atrapar a la banda de delincuentes que hace de las suyas a una cuadra de la estación departamental de la Policía Nacional Civil. Eso sería impensable. Para qué hacer público el hecho que los delincuentes se burlan de los servicios de seguridad. Para qué hacer público el hecho que nuestra cede turística es insegura. Para qué.
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